Un sismo de magnitud 4,4 se registró el lunes por la tarde en Los Ángeles California, extendiéndose hasta San Diego y afectando diversas zonas, pero sin causar daños ni heridos. El epicentro del temblor se ubicó cerca de Highland Park, a unos 10,5 kilómetros del centro de Los Ángeles, y tuvo una profundidad de 12,1 kilómetros, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).

El movimiento fue percibido en distintas partes del sur de California, incluyendo áreas como Palm Springs, San Diego, y hasta en el Valle de San Joaquín. A pesar de la intensidad, los informes preliminares indicaron que no hubo consecuencias mayores, aunque se produjeron algunas interrupciones y reacciones como la activación de alarmas de automóviles y la caída de agua en un edificio en Pasadena.

El sismo también tuvo impacto en lugares como el parque temático Disneyland en Anaheim y en el vecindario de Laurel Canyon en Los Ángeles. También un edificio médico fue sacudido, y se interrumpió una transmisión en vivo de ESPN. Las imágenes aéreas mostraron algunos efectos menores, como agua derramándose en la estructura histórica del Ayuntamiento de Pasadena.

Fuente: La Voz de América