En un sorprendente giro de los acontecimientos, Han Dong-hoon, líder del Partido del Poder Popular (PPP) de Corea del Sur, ha solicitado la suspensión inmediata de los poderes del presidente Yoon Suk-yeol. Esta petición surge tras la controvertida declaración de ley marcial por parte del presidente Yoon, que ha generado una ola de críticas y tensiones políticas en el país.
Han Dong-hoon, quien también es miembro del partido conservador al que pertenece el presidente Yoon, hizo este llamamiento durante una reunión de emergencia del PPP en la Asamblea Nacional. Según Han, el presidente Yoon ordenó los arrestos de varios líderes políticos, incluyendo al propio Han y a Lee Jae-myung, líder del principal partido opositor, el Partido Democrático (PD), durante la ley marcial proclamada el martes.
“Ante los hechos revelados recientemente, creo que es necesario suspender de inmediato al presidente Yoon Suk-yeol de sus funciones para proteger a la República de Corea y a su pueblo”, declaró Han. Añadió que las acciones radicales del presidente ponen al país en gran peligro y podrían repetirse si Yoon permanece en el poder.
La declaración de ley marcial por parte del presidente Yoon ha sido vista como un intento de consolidar su poder en medio de crecientes críticas y desafíos políticos. La medida ha sido ampliamente condenada tanto a nivel nacional como internacional, y ha llevado a la apertura de una investigación por parte de la policía surcoreana por posibles cargos de traición.
El Parlamento surcoreano ha convocado una sesión para votar sobre la destitución del presidente Yoon, una medida que podría marcar un punto de inflexión en la política del país. La votación está programada para este sábado, y se espera que los legisladores del PPP, que inicialmente apoyaban al presidente, reconsideren su posición tras las recientes revelaciones.
El ministro de Defensa en funciones, Kim Seon-ho, ha negado que se esté preparando una segunda ley marcial, a pesar de las preocupaciones expresadas por diversas organizaciones y ciudadanos. Kim aseguró que las Fuerzas Armadas no aceptarían una medida de este tipo bajo ninguna circunstancia.
La situación en Corea del Sur sigue siendo tensa y volátil, con el futuro político del presidente Yoon en juego. La comunidad internacional observa de cerca los desarrollos en el país, esperando que se resuelva la crisis de manera pacífica y democrática.
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